Los que vivimos en casas individuales con frecuencia tenemos un problema: evitar que los gatos hagan sus necesidades en el jardín o huerto. Al fin y al cabo, ellos son los reyes de la urbanización o del pueblo, pululando a sus anchas por donde les apetece y saltando de un sitio a otro. Y eso implica con bastante frecuencia que se paseen por los jardines de las casas para cavar agujeros, destrozar las plantas y hacer sus necesidades.
Cómo evitar que un gato haga sus necesidades en el jardín
Para evitar que un gato haga sus cosas en tu jardín tienes una gran variedad de opciones. Cada una de ellas se adapta mejor o peor a los distintos condicionantes posibles para tu caso: número de gatos que suelen pasar por la zona, si tienes (o no) huerto o el tamaño del jardín a proteger. Lo más probable es que tengas que usar varios métodos combinados salvo que tu jardín sea muy pequeño o tenga pocas visitas, en cuyo caso puede que con uno solo sea suficiente.