¿Sabes cuales son los transportines que le parecen cómodos a un gato? Seguro que tienes algunas ideas, pero lo cierto es que nuestros mininos no razonan como nosotros creemos, ellos tienen sus propias preferencias y gustos.
Si no te acuerdas o quieres volver a leer nuestra «comparativa de seguros» ve al post aquí.
Estos son los transportines más cómodos para tu gato
Que un gato acepte un transportín y se sienta cómodo en él es algo que puede variar según la raza, edad o tamaño del animal.
Incluso tus propias circunstancias personales harán más recomendable unos por encima de otros. De ahí la importancia de conocer los principales tipos de transportín y así poder hacer la mejor elección.
Por ejemplo: si lo llevas andando al veterinario es interesante un transportín-mochila, mientras que si viajas con frecuencia en coche será mejor uno de tela y lo más amplio posible. Por otra parte, si lo guardas en el exterior, los de plástico duro aguantarán el paso del tiempo sin problema. Venga ¡vamos a verlos todos!
La importancia de un buen transportín para que tu gato esté tranquilo
Los que tenemos gatos en casa tenemos como una máxima prioridad su bienestar. Nos encanta ofrecerles los rascadores más increíbles (incluso hacemos rascadores caseros) y no escatimamos en gastos para su comodidad o si tienen cualquier problema de salud.
Seguramente el producto que más se venda en el mundo gatuna sean las feromonas artificiales de Feliway que consiguen relajarlos, calmarlos y que no se peleen.
Si les ofreces un transportín cómodo harán el trayecto al veterinario o a la casa de la playa con la mayor tranquilidad posible y les afectará menos.
Los mejores transportines para gato en función de tus necesidades
Así, en función de las necesidades de tu vida y de lo que viajes con tu gato, será más adecuado escoger un tipo de transportín por encima de otro.
Transportín rígido o tradicional
El transportín rígido es el más popular desde hace décadas en todos los hogares de España. Como están fabricados en plástico duro no se degradan con el paso del tiempo y pueden durar toda la vida. Además son geniales para asegurar una buena ventilación dentro, pues van más abiertos que el resto de opciones.
El gran peligro de los transportines rígidos es el sistema de cierre. Como no cierran con cremallera, pueden ser más inseguros, así que cerciórate muy bien de que se ha cerrado correctamente antes de salir a la calle. Evitarás llevarte el disgusto de tu vida.
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A la mayoría nos va bien este tipo de transportín duro porque los gatos son todos unos traviesos que adoran arañar y rascar todo. Siempre está bien tener uno de este tipo, te durará toda la vida y te puede sacar de un apuro.
El transportín rígido o de plástico es ideal para estas situaciones:
- Almacenamiento en exterior o a la intemperie.
- Gatos traviesos a los que les encanta arañar y morder el transportín.
- Viajes con calor o zonas calurosas en las que la ventilación es importante
Los transportines de plástico, por las propiedades intrínsecas de este material, aguantan mejor el paso del tiempo y las inclemencias meteorológicas. Es cierto que no son los más respetuosos con el medio ambiente pero son resistentes y aguantan bien la degradación.
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Transportines de tela o blandos
Si piensas en un tipo de transportín donde tu gato esté tranquilo lo más seguro es que se vengan a tu cabeza los que están fabricados en tela.
Si tienes una casa pequeña o poco espacio de almacenamiento, los transportines de tela se pueden guardar plegados y ocupan mucho menos que el resto. En el aspecto negativo destaco el hecho de que, al ser de tela, los olores se quedan impregnados con facilidad. Y ya sabemos cómo reaccionan nuestros gatitos ante los olores: con gran desconfianza y rechazo, así que quizás no estén por la labor de entrar al transportín. Recuerda tener siempre la tela libre de olores, bien lavada y, si se hace pis dentro, usa un limpiador enzimático como el que te hemos recomendado en tantas ocasiones. El transportín de tela o flexible es genial para estas situaciones: Lo más importante para escoger el mejor transportín de tela para tu mascota es ir a por uno que sea amplio. Es importante que se pueda mover y dar la vuelta con facilidad dentro del transportín. Por desgracia, esto no es posible en muchos de ellos por su reducido tamaño. La gran ventaja de un transportín de tela es que se puede meter en la lavadora. Tan solo debes proteger las cremalleras para que no causen daños y podrás lavarlo a máquina sin hacer ningún esfuerzo. La mochila transportín es la última moda en transporte gatuno y comodidad. ¡Cada vez que entro en Instagram y veo una foto de alguien llevando a sus gatos así me caigo de la silla de la risa! De momento no he tenido la fortuna de ver a alguien por la calle con una mochila transportín y su minino, pero es cuestión de tiempo… Si tu veterinario está cerca y vas andando o si lo mueves de una casa a otra a pie sabrás de sobra lo incómodo que es cargar con una sola mano todo su peso. Además, el pobre animal tampoco irá contento, pues el balanceo causado por nuestros pasos puede hacer que se mareen y vomiten. Escoge una mochila-transportín si en tu caso: Por eso, si andas más de lo normal con tu gato a cuestas, una mochila transportín es la mejor solución. Tu mascota irá encantada viendo el panorama por la calle, evitarás que le siente mal el paseo y distribuirás mejor el peso sobre tu espalda. Además, serás objeto de todas las miradas y seguro que alguien te pregunta o incluso te echa una foto con tu gracioso minimo. Mis amigos se sorprenden cuando les cuento que viajo con mis gatos. Es cierto que no suelen salir de casa en el día a día, pero eso no quita que nuestras mascotas disfruten yendo de vacaciones con nosotros o pasando los fines de semana en la casa del pueblo. ¡Podría dejarlos solos sin problema pero sé que les encanta venir y descubrir cosas nuevas! Para viajar con mis gatos siempre utilizo los transportines más grandes que tengo (tengo muchos). Es la forma de hacerles el viaje cómodo y, ante todo, de evitar mareos y vómitos en lo que dura el trayecto en coche. Los transportines XL son aconsejables en estas situaciones: En el pasado los viajes de mis gatos siempre eran en transportines de tamaño normal. Pensaba que ellos iban cómodos, sin embargo, me di cuenta de que no era así. Maullaban sin parar y yo pensaba que era normal y era debido al propio viaje. Última actualización el 2024-11-21 / Enlaces de afiliados / Imágenes de la API para Afiliados Seguro que ya tienes claro el tipo de transportín que mejor se adapta a las condiciones de tu mascota y de vuestra cotidianidad. Sin embargo, cuando lo recibas en casa y quieras usarlo, puede que tu gato no quiera entrar en él. ¿Qué está pasando? Nunca obligues a un gato a entrar en un transportín contra su voluntad. Puede que ese día en concreto te sirva esta maniobra, pero se llevarán una experiencia muy negativa y la próxima vez será todavía más complicado meterlo ahi. Todos sabemos lo difícil que puede resultar convencer a los gatos para que se metan dentro de los transportines por su propia voluntad. Alguno os estaréis riendo: «Difícil no, imposible». Hay algunos consejos que puedes seguir para ayudar a que tu gato no rechace su transportín: ¡A algunos gatitos les encanta usar los transportines como cuevas para jugar o incluso como camas para dormir un rato! Si es vuestro caso, no se lo quites ni lo guardes, los dos salís ganando… El estrés en los gatos se manifiesta de formas muy diferentes y muchas de ellas te pueden llevar de vuelta al veterinario pensando que está enfermo porque no come, se le cae el pelo, maúlla sin parar, etc. Los gatos son exigentes y tenemos que vivir con ello… hasta nos gusta ¿verdad? Es fácil conseguir que esté tranquilo, el gasto en el transportín será prácticamente el mismo, elige bien y elegirás tranquilidad. Si no te acuerdas o quieres volver a leer nuestra «comparativa de seguros» ve al post aquí.
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